Lección 28 Cuando el Dedo de Dios Escribe

El Momento de la Verdad Autor: Cyberspace Ministry  Bienvenido al estudio de esta nueva lección. Oremos juntos: Padre nuestro que estás en el cielo, En una lección anterior, nos has mostrado en Tu Palabra que habrá un juicio en el cual nuestros pensamientos, palabras y acciones serán examinadas. Hemos aprendido también que Tu ley será la regla por la que seremos juzgados. Por eso es que ahora deseamos aumentar nuestro conocimiento en cuanto a Tu ley. Por favor, acompáñanos, para que nuestras mentes y corazones sean abiertos a la verdad que se encuentra en Tu Palabra y que quieres mostrarnos en este día. Oramos en el nombre de Jesucristo. Amén.   Génesis 2:16,17 Comentario Y Jehová Dios mandó al hombre diciendo: «Puedes comer de todos los árboles del jardín; pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que comas de él, ciertamente morirás.» Desde el principio mismo, el hombre recibío instrucciones precisas de Dios acerca de las cosas que podía y no podía hacer. El propósito de estas leyes no era oprimir al hombre, sino enseñarle el único camino a la felicidad.   Romanos 5:12 Comentario El pecado entró en el mundo por medio de un solo hombre. Al elegir desobedecer la ley de Dios, Adán se convirtió en un pecador, separándose así de Dios. Si la ley no hubiera existido en los días de Adán, no podía haber sido juzgado como un pecador, en otras palabras, como un transgresor de la ley de Dios. 1 Juan 3:4 El pecado es infracción de la ley. Romanos 4:15 Donde no hay ley, tampoco hay transgresión.    Génesis 26:5 Comentario [Jehová dijo:] «Abraham obedeció Mi voz y guardó Mi ordenanza, Mis mandamientos, Mis estatutos y Mis instrucciones.» Guardados por Adán y Eva, los mandamientos de Dios fueron enseñados de generación en generación. Vemos que, siglos después, Abraham conocía estos mandamientos muy bien y los obedecía.    Éxodo 1:13,14 Comentario Entonces los egipcios hicieron trabajar [a los hijos de Israel] con dureza, y amargaron sus vidas con el pesado trabajo de hacer barro y adobes, aparte de todo trabajo en el campo; y en todos los tipos de trabajo les trataban con dureza. Después de estas cosas, los Israelitas fueron convertidos en esclavos por más de cuatro siglos. Luego de liberarlos de la esclavitud egipcia, Dios consideró necesario darles Su ley una vez más, de manera solemne... Éxodo 12:40 El tiempo que los hijos de Israel habitaron en Egipto fue de 430 años.   Éxodo 19:16,18 Comentario Hubo truenos y relámpagos, una densa nube sobre el monte, y un fuerte sonido de corneta. Y todo el pueblo que estaba en el campamento se estremeció. (...) Todo el monte Sinaí humeaba, porque Jehová había descendido sobre él en medio de fuego. La proclamación de la ley fue un evento inolvidable y una demostración del poder Divino. Hebreos 12:21 Y tan terrible era aquel espectáculo que Moisés dijo: «¡Estoy aterrado y temblando!»   Éxodo 34:28 Comentario Y en las tablas [Jehová] escribió las palabras del pacto: los Diez Mandamientos. El texto de la ley, es decir, los Diez Mandamientos, fueron escritos en dos tablas de piedra. Deuteronomío 4:13 [Jehová] os declaró Su pacto, el cual os mandó poner por obra: los Diez Mandamientos. Y los escribió en dos tablas de piedra.     Éxodo 31:18 Comentario Y cuando [Jehová] acabó de hablar con él en el monte Sinaí, dio a Moisés dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios. Los Diez Mandamientos son de tanta importancia a los ojos de Dios, que decidió escribirlos Él mismo, con Su propio dedo. Éxodo 32:16 Las tablas eran obra de Dios, y la escritura era escritura de Dios, grabada sobre las tablas.   Éxodo 20:1,2 Comentario Y Dios habló todas estas palabras, diciendo: «Yo soy Jehová tu Dios que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de esclavitud.» Así comienza el texto de la ley. Veamos cuál es el contenido de cada uno de los Diez Mandamientos.     Primer Mandamiento: Éxodo 20:3 Comentario No tendrás otros dioses delante de Mí. El primer mandamiento nos asegura que existe solamente un Dios: el Señor, Jehová, autor de la ley. Cualquier otra adoración a otro que no sea el Señor, es ofrecida a Satanás, «el dios de esta edad» (2 Corintios 4:4), el único otro poder espiritual que está trabajando aquí abajo. Mateo 6:24 Nadie puede servir a dos señores; porque aborrecerá al uno y amará al otro, o se dedicará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.     Segundo Mandamiento (parte I):Éxodo 20:4 Comentario No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. El segundo mandamiento prohibe terminantemente cualquier forma de idolatría, incluyendo la adoración de Dios en la forma de imágenes o estatuas. Dios desea que elevemos nuestros pensamientos directamente a Él, sin ninguna imagén que sirva de intermediaria. 1 Juan 5:21 Hijitos, guardaos de los ídolos.   Segundo Mandamiento (parte II):Éxodo 20:5,6 Comentario No te inclinarás ante ellas ni les rendirás culto. Porque Yo soy Jehová tu Dios, un Dios celoso que castigo la maldad de los padres sobre los hijos, sobre la tercera y sobre la cuarta generación de los que Me aborrecen. Pero muestro misericordia por mil generaciones a los que Me aman y guardan Mis mandamientos. Notemos que, cualquier cosa que tome la prioridad sobre Dios en nuestra vida es también un ídolo: puede ser nuestro trabajo, nuestro dinero, nuestra familia, nuestros amigos, nuestros pasatiempos, etc. Dios debe ser el primero por sobre todo y en todas las cosas.    Tercer Mandamiento:Éxodo 20:7 Comentario No tomarás en vano el nombre de Jehová tu Dios, porque Jehová no dará por inocente al que tome Su nombre en vano. El cristiano, cuando da un mal testimonio, también blasfema, tomando así el nombre de Dios en vano. Romanos 2:23,24 Tú que te jactas en la ley, ¿deshonras a Dios con la infracción de la ley? Porque como está escrito: «El nombre de Dios es blasfemado por causa de vosotros entre los gentiles.»     Cuarto Mandamiento (parte I):Éxodo 20:8-10 Comentario Acuérdate del día del Sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra, pero el séptimo día será Sábado para Jehová tu Dios. No harás en él obra alguna, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu animal, ni el forastero que está dentro de tus puertas. Los primeros cuatro mandamientos resumén nuestras obligaciones hacia Dios. En el cuarto mandamiento, Dios nos pide que recordemos el séptimo día, el Sábado, para santificarlo no haciendo ningún trabajo secular en ese día.    Cuarto Mandamiento (parte II):Éxodo 20:11 Comentario Porque en seis días Jehová hizo los cielos, la tierra y el mar, y todo lo que hay en ellos, y reposó en el séptimo día. Por eso Jehová bendijo el día del Sábado y lo santificó. La institución del séptimo día como día de reposo se remonta a la creación. Regresaremos a este tópico en una lección futura. Génesis 2:3 Por eso Dios bendijo y santificó el séptimo día, porque en él reposó de toda Su obra de creación que Dios había hecho.     Quinto Mandamiento:Éxodo 20:12 Comentario Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se prolonguen sobre la tierra que Jehová tu Dios te da. Los últimos seis mandamientos resumén nuestras obligaciones hacia nuestro prójimo. Primero, el respeto debido a la autoridad de los padres, lo cual lleva al hijo o a la hija a confiar en Dios. Efesios 6:1-3 Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. «Honra a tu padre y a tu madre» (que es el primer mandamiento con promesa) «para que te vaya bien y vivas largo tiempo sobre la tierra.»     Sexto Mandamiento: Éxodo 20:13 Comentario No cometerás homicidio. El sexto mandamiento va más allá del asesinato: implica también el respeto de la vida, el rechazo de la guerra, el crimén y el suicidio. Toda demostración de odio, todo aquello que obstaculice la libertad del prójimo, todo lo que pueda dañar la integridad, son condenados. 1 Juan 3:15 Todo aquel que odia a su hermano es homicida, y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permaneciendo en él.     Séptimo Mandamiento:Éxodo 20:14 Comentario No cometerás adulterio. Aquí, nuevamente, el mandamiento va más allá de lo que parece ser a primera vista: de hecho, el simple acto de codiciar con los ojos es una transgreción de la ley de Dios. Dios, por lo tanto, nos manda no sólo a tener control propio sobre nuestros actos, sino también nuestros pensamientos, ayudados por Su poder que obra en nosotros. Mateo 5:28 Pero Yo os digo que todo el que mira a una mujer para codiciarla ya adulteró con ella en su corazón.     Octavo Mandamiento: Éxodo 20:15 Comentario No robarás. Cualquier traspaso o agravio a la propiedad ajena, es una violación del octavo mandamiento. Debemos ganar lo que necesitamos a través del trabajo concienzudo y honesto. Efesios 4:28 El que robaba no robe más, sino que trabaje esforzadamente, haciendo con sus propias manos lo que es bueno, para tener qué compartir con el que tenga necesidad.     Noveno Mandamiento:Éxodo 20:16 Comentario No darás falso testimonio contra tu prójimo. La mentira y el chisme no pueden servir a la causa de Dios. Las palabras han de ser herramientas para la edificación; y el cristiano, un siervo de la verdad. Zacarías 8:16,17 «Estas son las cosas que habéis de hacer: Hablad verdad cada cual con su prójimo. Juzgad en vuestros tribunales con juicio de paz. Ninguno de vosotros piense en su corazón el mal contra su prójimo. No améis el falso juramento, porque Yo aborrezco todas estas cosas,» dice Jehová.     Décimo Mandamiento: Éxodo 20:17 Comentario No codiciarás la casa de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna que sea de tu prójimo. La envidia, la codicia, raíz de todos los males, llevóa a Adán y a Eva a desobedecer a Dios. Hoy aún lleva a millones de personas a la perdición. 1 Juan 2:17 Y el mundo está pasando, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.     Romanos 13:8-10 Comentario El que ama al prójimo ha cumplido la ley. Porque los mandamientos «no cometerás adulterio,» «no cometerás homicidio,» «no robarás,» «no codiciarás,» y cualquier otro mandamiento se resumen en esta sentencia: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo.» El amor no hace mal al prójimo; así que el amor es el cumplimiento de la ley. Recordemos: los primeros cuatro mandamientos resumén nuestras obligaciones hacía Dios, y los últimos seis, nuestras obligaciones hacía nuestro prójimo.    Mateo 22:36-40 Comentario «Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento de la ley?» Jesús le dijo: «“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente.” Este es el grande y el primer mandamiento. Y el segundo es semejante a él: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas.» La obediencia a los primeros cuatro mandamientos demuestra nuestro amor a Dios. La obediencia a los seis últimos mandamientos demuestra nuestro amor hacia nuestro prójimo.   Juan 14:15 Comentario [Y Jesús les dijo:] «Si Me amáis, guardaréis Mis mandamientos.» Dios quiere darnos las fuerzas y el poder que necesitamos para guardar Sus mandamientos. Si Le amamos, Le permitiremos obrar en nosotros: y rápidamente, guardar Sus mandamientos será una delicia para nosotros, y no una carga. 1 Juan 5:3,4 Pues éste es el amor de Dios: que guardemos Sus mandamientos. Y Sus mandamientos no son gravosos. Porque todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo.     El Salmo 119 nos enseña que en el guardar la ley de Dios nos trae felicidad: «Abre mis ojos, y miraré las maravillas de Tu ley.» (Salmo 119:18) «Guíame por la senda de Tus mandamientos, porque en ella me deleito.» (Salmo 119:35) «Me deleitaré en Tus mandamientos, los cuales he amado.» (Salmo 119:47) «¡Cuánto amo Tu ley! Todo el día ella es mi meditación.» (Salmo 119:97) «Aflicción y angustia me han alcanzado, pero Tus mandamientos han sido mi delicia.» (Salmo 119:143) «Mucha paz tienen los que aman Tu ley.» (Salmo 119:165)     Deuteronomío 4:2 Comentario No añadáis a las palabras que yo os mando, ni quitéis de ellas, de modo que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios, que yo os mando. Como veremos en una lección más adelante, los hombres a menudo han tratado de modificar el texto de los Diez Mandamientos, algo estrictamente prohibido por Dios. Job 23:12 (RVR 1960) Del mandamiento de Sus labios nunca me separé; guardé las palabras de Su boca más que mi comida.   Mateo 5:18,19 Comentario De cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni siquiera una jota ni una tilde pasará de la ley hasta que todo haya sido cumplido. Por lo tanto, cualquiera que quebranta el más pequeño de estos mandamientos y así enseña a los hombres, será considerado el más pequeño en el reino de los cielos. Pero cualquiera que los cumple y los enseña, éste será considerado grande en el reino de los cielos. Jesús lo dejó muy en claro: nadie tiene el derecho de cambiar un sólo mandamiento para de esa forma adaptar el texto de la ley de Dios a las costumbres de la sociedad.   Deuteronomío 5:29 Comentario ¡Oh, si tuviesen tal corazón que Me temiesen y guardasen todos Mis mandamientos todos los días, para que les fuera bien a ellos y a sus hijos para siempre! La ley de Dios nos enseña el único camino a la felicidad. La elección para obedecer es nuestra, sabiendo que un día cosecharemos las consecuencias de nuestra elecciones. Eclesiastes 12:13,14 La conclusión de todo el discurso oído es ésta: Teme a Dios y guarda Sus mandamientos, pues esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá a juicio toda acción junto con todo lo escondido, sea bueno o sea malo.     Agradezcámosle a Dios por Su dirección: Padre nuestro, Hay tantos que dicen amarte. Sin embargo, Tú has dicho que los que verdaderamente Te aman, guardan Tus mandamientos. Reconocemos que los Diez Mandamientos son faros que has puesto en nuestro camino, no para molestarnos, sino para mostrarnos el camino a la felicidad. Por eso es que humildemente pedimos que nos concedas recibir Tu Santo Espíritu, de manera que recibamos también el poder para obedecerte y seguir Tus mandamientos, porque sin Ti no somos nada. En el nombre de Jesucristo. Amén. Examen para la Lección 28   Desde el principio de la Biblia, vemos a Dios dando las siguientes instrucciones al hombre: «Puedes comer de todos los árboles del jardín; pero del árbol del conocimiento del y del no comerás, porque el día que comas de él, ciertamente .» El propósito de estas leyes no era oprimir al hombre, sino enseñarle el único camino a la felicidad. También en el libro de Génesis, hemos visto el papel que los mandamientos de Dios jugaron en la vida de Abraham. ¿Cuál de las siguientes frases es correcta? Abraham no conocía los mandamientos de Dios. Abraham no se sometió a los mandamientos de Dios. Abraham obedeció algunos de los mandamientos de Dios. Abraham obedeció todos los mandamientos de Dios. Los Diez Mandamientos son tan importantes a los ojos de Dios, que el libro de Éxodo especifica lo siguiente: «Las tablas eran de Dios, y la escritura era de Dios, grabada sobre las tablas.» Esto es algo muy importante en lo que debemos de meditar... El segundo mandamiento prohibe terminantemente cualquier forma de idolatría. De la siguiente lista, marque todas aquellas cosas que pueden llegar a convertirse en un ídolo, es decir, aquello que toma prioridad sobre Dios en nuestras vidas: El trabajo. El dinero. La familia y los amigos. Las actividades recreativas. El tercer mandamiento nos ordena no tomar el nombre de Dios en vano. La Epístola de Pablo a los Romanos amplía la importancia de este mandamiento: «Tú que te jactas en la ley, ¿ a Dios con la de la ley? Porque como está escrito: “El nombre de Dios es por causa de vosotros entre los gentiles.“» En el cuarto mandamiento, Dios nos pide que recordemos el séptimo día, el Sábado, para santificarlo, no haciendo en él trabajo secular alguno. El texto indica que, al guardar este mandamiento, reconocemos a Dios como nuestro: Juez. Legislador. Creador. Pastor. El sexto mandamiento dice: «No cometerás homicidio.» Este mandamiento prohibe más que el asesinato, como podemos ver en la Primera Epístola de Juan: «Todo aquel que a su hermano es , y sabéis que ningún tiene vida eterna permaneciendo en él.» Los primeros cuatro mandamientos resumen nuestras responsabilidades hacia Dios, y los seis últimos, nuestras responsabilidades hacia nuestro prójimo. En la Primera Epístola de Juan se resume de la siguiente manera: «Pues éste es el amor de Dios: ...» «... que enseñemos que Sus mandamientos han sido abolidos.» «... que reemplacemos Sus mandamientos por la tradición de los hombres.» «... que enseñemos que Sus mandamientos son para los judios solamente.» «... que guardemos Sus mandamientos.» A aquellos que desearían modificar el texto de los Diez Mandamientos de Dios, para adaptarlos a las costumbres de la sociedad, el libro de Deuteronomío tiene la advertencia: «No a las palabras que yo os mando, ni de ellas, de modo que los mandamientos de Jehová vuestro Dios, que yo os .» Nuestra lección concluyó con el siguiente consejo tomado del libro de Eclesiastes: «La conclusión de todo el discurso oído es ésta: Teme a Dios y guarda Sus mandamientos, pues esto es el todo...» «... del hombre.» «... del que está bajo el Viejo Pacto.» «... del judio.» «... del que no tiene un Salvador.» Su nombre: